Acompáñanos en un viaje a través de la vida de Louis Feinberg, el hombre detrás del personaje de Larry Fine, desde sus humildes comienzos hasta su fallecimiento. Descubriremos los altibajos de una existencia marcada por el éxito, la tragedia y la perseverancia. Exploraremos su infancia, su carrera en el mundo del espectáculo, sus relaciones personales y su lucha contra la adversidad.
De Filadelfia a Broadway: Los inicios de Larry Fine
Larry Fine, cuyo nombre real era Louis Feinberg, nació el 5 de octubre de 1902 en Filadelfia, Pensilvania, en el seno de una familia de joyeros judíos. Su infancia estuvo marcada por un trágico accidente a los cuatro años, cuando sufrió graves quemaduras con ácido oxálico en el taller de su padre. Este incidente, que requirió un injerto de piel y una extensa rehabilitación, tuvo un impacto profundo en su vida. La terapia musical, especialmente el violín, jugó un papel crucial en su recuperación.
La música se convirtió en su pasión. Su talento con el violín lo llevó a participar en teatros locales, alimentando sus sueños de estudiar en Europa. Sin embargo, la Primera Guerra Mundial frustró sus planes. En un giro inesperado, Larry también incursionó en el boxeo bajo el seudónimo de Kid Roth, pero la oposición de su padre lo alejó de este camino. Finalmente, el joven Louis encontró su verdadera vocación en el mundo del espectáculo, adoptando el nombre artístico de Larry Fine en 1921. Este cambio marcó el inicio de su ascenso hacia la fama.
Fue en el sexteto Ghost Edwards News Boys donde Larry encontró su lugar. Allí no solo perfeccionó sus habilidades como artista, sino que también conoció a su futura esposa, Mabel, y a sus cuñadas, con quienes más tarde actuaría en el sketch "Las hermanas Honey Fine". Esta experiencia resultó fundamental en la formación de su estilo cómico y en su capacidad para trabajar en equipo. Su talento innato y su carisma le abrieron las puertas a nuevas oportunidades, preparando el terreno para su encuentro con Moe y Shemp Howard.
El nacimiento de Los Tres Chiflados: Éxito y sombras
En 1925, el destino lo llevó a Chicago, donde Ted Healy, un talentoso actor y guionista, lo vio actuar en el Rainbow Gardens. Healy, impresionado por su talento cómico, lo reclutó para formar un nuevo trío, junto a Moe y Shemp Howard. Este trío, que inicialmente se presentó en Broadway y luego en el cine, marcó el inicio de una era dorada para Larry Fine. La primera película del trío, "Soup to Nuts" (1934), sentó las bases para su futuro éxito.
A pesar del éxito de la colaboración con Ted Healy, su relación fue tumultuosa. Healy era un hombre exigente y a menudo explotaba a sus compañeros. Finalmente, en 1934, los Tres Chiflados se independizaron de Healy, abriendo un nuevo capítulo en sus carreras. Con la salida de Healy, Moe, Larry y Shemp se consolidaron como Los Tres Chiflados, construyendo una imagen propia y un estilo único que los inmortalizó en la historia del cine cómico. Larry, con su personalidad tranquila y su talento para el violín, actuaba como un contrapunto perfecto a la energía desenfrenada de Moe y la torpeza de Shemp y Curly. Su papel como elemento unificador del trío fue esencial para su éxito.
Sin embargo, el brillo del éxito ocultaba aspectos menos conocidos de la vida de Larry Fine. Su imagen pública contrasta con su vida personal, marcada por la falta de puntualidad, la mala administración de sus finanzas y una afición al juego que le generó problemas económicos. Estos aspectos, aunque no tan conocidos, forman parte integral de su historia.
La vida personal de Larry Fine: Amor, tragedia y adversidad
Tras el éxito en el cine, Larry Fine se casó con Mabel, su compañera de toda la vida. Su relación fue compleja, marcada por el amor y la comprensión, pero también por las dificultades económicas y los problemas de alcoholismo de Mabel. Su vida familiar se desarrollaba en hoteles lujosos, una imagen que contrasta con sus problemas financieros. La falta de inclinación de Larry por las tareas domésticas y el comportamiento a veces abusivo de Mabel contribuyeron a las tensiones en su matrimonio.
La tragedia golpeó duramente a la familia Fine con la muerte de su hijo, Johnny, en un accidente automovilístico en 1961. Este suceso marcó un punto de inflexión en sus vidas, dejando una profunda herida en el corazón de Larry y Mabel. La muerte de Mabel en 1967, tras 41 años de matrimonio, sumió a Larry en una profunda depresión. Estos eventos familiares, aunque no siempre explícitos en sus películas, moldearon su carácter y su personalidad.
A partir de 1970, la salud de Larry Fine comenzó a deteriorarse. Un ataque al corazón y una serie de derrames cerebrales lo dejaron parcialmente paralizado y confinado a una silla de ruedas. A pesar de sus limitaciones físicas, mantuvo su espíritu jovial y su amabilidad, visitando escuelas y compartiendo chistes con los niños. Su generosidad y su capacidad para conectar con la gente eran evidentes incluso en sus últimos años.
El final del camino: Un legado inmortal
Sus últimos años los pasó en el Motion Picture Home, donde recibió el cariño de su hija Phyllis y de su amigo Moe Howard. Una anécdota conmovedora relata la visita de un niño ciego que, al tocarlo, expresó su admiración por Larry Fine. Este encuentro provocó una profunda emoción en el comediante, demostrando la conexión especial que tenía con sus fans. Su legado como Larry Fine, uno de Los Tres Chiflados, es una prueba de su capacidad para conectar con la audiencia a través de la comedia.
En sus últimos años, Larry Fine colaboró en la escritura de sus memorias, pero la experiencia resultó frustrante. Un acuerdo desfavorable con James Carone llevó a que este último se atribuyera la autoría del libro. Sin embargo, Larry confió en Jim Terry, a quien le entregó sus archivos personales para la publicación de una biografía autorizada. Finalmente, "One Fine Stooge: The Untold Story of Larry Fine" se publicó, cumpliendo el deseo de Larry de compartir su historia con el mundo. Su historia, llena de altibajos, refleja la compleja vida detrás de la imagen pública de un Chiflado.
Larry Fine falleció el 24 de enero de 1975, tras una nueva serie de derrames cerebrales. Su partida marcó el fin de una era, pero su comedia y su personaje siguen vivos en la memoria de millones de espectadores. La transformación de su casa natal en un restaurante con un mural en su honor es un testimonio del cariño y el respeto que se le tiene. La magia del trío original de Los Tres Chiflados es inigualable, y Larry Fine, con su talento y su personalidad única, ocupó un lugar irremplazable en este icónico grupo de comediantes. Para muchos, Larry Fine es, simplemente, el Chiflado favorito. Su historia nos recuerda que la vida de las estrellas, incluso las más brillantes, a menudo está llena de contrastes.